“…El poder entregado por Cristo a los Apóstoles pervive en los obispos y sacerdotes, y cuando Nuestro Maestro nos encargó que expulsáramos a los demonios, estamos seguros de que alejamos a los demonios. No vemos el mundo invisible, pero todo este ritual tiene un efecto en el mundo invisible. El presente ritual está cargado de ritos simbólicos, pero los demonios saben que esos ritos tienen efecto sobre ellos. La Iglesia tiene una labor de predicación y una labor de enviar la gracia a las almas, con los sacramentos y sacramentales; pero la Iglesia también tiene una labor de defensa frente a los poderes de las tinieblas…”.
Magno exorcismo
ROBERTO
O´FARRILL
verycreer.com
Me
encontraba bajo sigilo, y por lo tanto no podía hacer público el gran
acontecimiento que tuvo lugar en la catedral de San Luis Potosí, del que fui
testigo además de participante; pero ahora, toda vez que ha transcurrido el
tiempo necesario para que el papa Francisco fuese enterado, ya puedo decirlo:
el miércoles 20 de mayo, hacia el medio día, se celebró el ritual del magno
exorcismo de México, a puerta cerrada, con la participación del cardenal Juan
Sandoval Iñiguez, arzobispo emérito de Guadalajara; monseñor Jesús Carlos
Cabrero Romero, arzobispo de San Luis Potosí; el Padre José Antonio Fortea,
demonólogo y exorcista; el Padre Carlos Spahn, exorcista; el Padre Alberto
Ferrara Schievano, exorcista de Tehuacán; varios exorcistas más, los señores
canónigos de Catedral, sacerdotes, seminaristas y algunos laicos.
En el
ritual, preparado por el Padre Fortea, se explica que “Estos ritos se realizan
en diferentes puntos de la catedral. Creemos, estamos seguros, totalmente
ciertos de que estos ritos tienen una efectividad real en el mundo de los
espíritus. El poder entregado por Cristo a los Apóstoles pervive en los obispos
y sacerdotes, y cuando Nuestro Maestro nos encargó que expulsáramos a los
demonios, estamos seguros de que alejamos a los demonios. No vemos el mundo
invisible, pero todo este ritual tiene un efecto en el mundo invisible. El
presente ritual está cargado de ritos simbólicos, pero los demonios saben que
esos ritos tienen efecto sobre ellos. La Iglesia tiene una labor de predicación
y una labor de enviar la gracia a las almas, con los sacramentos y
sacramentales; pero la Iglesia también tiene una labor de defensa frente a los
poderes de las tinieblas. La Santa Iglesia Católica no sólo predica la Verdad,
también defiende a las almas frente a las potestades y dominaciones de los
infiernos”.
Debido a que
el Magno exorcismo se celebró hacia el interior de la catedral, y a puerta
cerrada, presento en seguida, por los grandes beneficios que esto traerá para
nuestro país, los elementos principales del ritual.
1) Ritos de circunvalación:
La procesión
recorrió el perímetro de la catedral, por dentro, y se detuvo a hacer un
exorcismo a las milicias infernales en cada punto cardinal. A lo largo del
recorrido hubo una sucesión de oraciones deprecativas y de fórmulas
conjuratorias.
2)
Conjuración al Norte:
- Oración
deprecativa: “Señor, tú eres nuestra defensa y nuestro refugio;
te
pedimos que libres a tu Santa Iglesia de las trampas de los demonios y de las
palabras crueles de sus perseguidores. Protégela bajo la sombra de tus alas,
rodéala con el escudo de tu fortaleza
y muéstrale la clemencia de tu
salvación. Por Cristo, nuestro Señor. Amén”.
3)
Conjuración al Oeste:
- Oración
deprecativa: “Dios, Creador y Defensor del género humano, dirige tu mirada
sobre tu santa Iglesia. El antiguo adversario desea atormentarla cruelmente,
quiere oprimirla con fuerte violencia
y desea atormentarla con
cruel terror. Envía sobre ella tu Espíritu Santo para que la haga fuerte en la
lucha,
le enseñe a rogar en la tribulación
y la defienda con su
poderosa protección. Por Cristo Nuestro Señor. Amén”.
-
Conjuración: “Te conjuro, Satanás, que engañas al género humano, reconoce al
Espíritu de la verdad y de la gracia
que repele tus insidias y
confunde tus mentiras. Retrocede ante la Iglesia fundada por Dios,
a
quien el mismo Espíritu marcó con su sello poderoso. Retírate de este edificio que
Dios hizo templo sagrado
con una unción espiritual. Retírate de
esta construcción material y de la Iglesia universal. Por Jesucristo Nuestro
Señor. Amén”.
4)
Conjuración al Sur:
- Oración
deprecativa: “Escucha, Padre santo,
el gemido de tu Iglesia
suplicante;
no permitas que tus hijos
sean engañados por el padre de la
mentira. No dejes que tus servidores,
a quienes Cristo redimió con su Sangre, sean
llevados a la cautividad del diablo; impide que el templo de tu Espíritu
sea
mancillado por los espíritus inmundos. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.
- Conjuración:
Retírate, Satanás, en el nombre del Padre +, y del Hijo +, y del Espíritu +
Santo; retírate por la fe y la oración de la Iglesia; retírate por la señal de
la santa Cruz, de nuestro Señor Jesucristo, que vive y reina por los siglos de
los siglos. Amén”.
5)
Conjuración al Este:
- Oración
deprecativa: “Dios justo y bueno, líbranos de aquellos enemigos que fueron
expulsados de los cielos. Custódianos de aquellos agresores que lanzan flechas
invisibles sobre las almas. Tú eres nuestra fortaleza. Con tu favor, veremos la
derrota del Enemigo. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén”.
-
Conjuración: “Exorcizo a todo espíritu maligno que intenta atacar a la Iglesia.
Exorcizo a todo poder satánico que ataca a la Iglesia. En el nombre y virtud de
Nuestro Señor Jesucristo, te ordeno que salgas y huyas de la Iglesia de Dios,
de las almas creadas a imagen de Dios y redimidas por la preciosa Sangre del
Divino Cordero. En adelante no oses, perfidísima serpiente, engañar al género
humano, perseguir a la Iglesia de Dios y zarandear a los elegidos. Te lo manda
Dios Altísimo, a quien en tu insolente soberbia aún pretendes asemejarte. Por
Cristo Nuestro Señor. Amén”.
6) Invocación
de los Santos Ángeles:
El Padre
Carlos Spahn los invocó para que ayuden y protejan a la Iglesia: “San Miguel
Arcángel, querubines de Dios, serafines de Dios, ángeles y arcángeles, protejan
al Rebaño de Cristo de los lobos infernales (pausa brevísima). Escucha, Señor,
la oración de San Miguel Arcángel y de todos los ángeles que te sirven. Dios de
todo bien, impide la acción diabólica; Tú que eres la fuente de la verdad y del
perdón, destruye las falaces insidias del diablo; Por Cristo Nuestro Señor.
Amén”.
7) Conjuración
hacia la Puerta del Abismo:
-La gran
oración deprecativa: “Señor de la libertad y de la gracia, desata los lazos de
la perversidad. Tú que amas y salvas al hombre, que escuchas paternalmente la
oración de los apóstoles Pedro y Pablo y de todos los santos que con tu gracia
vencieron las asechanzas del Maligno, protege a tu Santa Iglesia de todo ataque
demoniaco, para que te glorifique con sus alabanzas. Libra al Rebaño de Cristo
de los lobos infernales. Pon una muralla alrededor de tu Iglesia universal. Pon
a tus ángeles alrededor de este templo. Aleja a los tentadores de esta ciudad.
Pon en fuga de esta diócesis a los invisibles sembradores de la iniquidad, para
que así reine la paz. Cierra las puertas del Abismo, cierra las compuertas del
Infierno, cierra la salida del Averno. Que tu mano todopoderosa impida que
salgan los poderes infernales, para que así tú seas glorificado con la
concordia de tus hijos, con la alabanza de los renacidos del agua y del
Espíritu. Por Cristo Nuestro Señor. Amén”.
-Exorcismo,
que pronunció el cardenal Sandoval revestido con la mitra y con el báculo en la
mano: “Te exorcizamos, Serpiente Antigua, aléjate del Rebaño de Cristo. Te lo
manda la majestad de Cristo, el Verbo eterno de Dios hecho hombre, quien para
salvar a la estirpe perdida por tu envidia, edificó su Iglesia sobre roca
firme. Amén”.
Rito de la
Percusio: “Señor, Rey del Cielo y de la Tierra, golpea los poderes del infierno
(golpeó el suelo tres veces con el báculo). Dios Todopoderoso, por la
intercesión de María Santísima e Inmaculada, golpea y aplasta a las potestades
y principados rebeldes (golpeó por segunda vez el suelo tres veces con el
báculo). Creador de todas las cosas celestes y terrestres, golpea, aplasta y
quebranta a todas las jerarquías del Abismo. Vengan, santos ángeles de Dios,
ayúdenos en esta tarea” (golpeó por tercera y última vez el suelo con tres
solemnes golpes). Luego de la Percussio, otro sacerdote hizo el siguiente
exorcismo:
“Te
exorcizo, Serpiente Antigua, aléjate de la Santa Iglesia de Dios. Te lo manda
el santo signo de la Cruz + y la virtud de todos los Misterios de la fe
cristiana. Te lo manda la excelsa Madre de Dios, la Virgen María, quien con su
humildad desde el primer instante de su Inmaculada Concepción aplastó tu orgullosa
cabeza. Señor, cierra la Puerta del Abismo. Que no salgan de ella hacia la
tierra las potestades infernales. Por Cristo Nuestro Señor. Amén”. (Con estos
exorcismos se ordena a los demonios que no salgan del infierno para
atormentarnos).
8)
Invocación a la Santísima Virgen María para que ayude con su intercesión a la
Iglesia: “Virgen Santísima, terror de los demonios, no nos desampares. Ruega a
Dios por nosotros. Protégenos como madre nuestra que eres. Nuestros enemigos
son grandes, pero tú, Madre de Dios, eres más grande todavía (pausa brevísima).
Escucha, Dios misericordioso, la oración de la bienaventurada Virgen María,
cuyo Hijo encomendó a la Madre todos los hombres como hijos. Que resplandezca
en tu Iglesia, todavía más, la luz de la verdad, que aletee en ella el Espíritu
de la paz. Por Cristo Nuestro Señor. Amén”.
9)
Conjuración hacia la Puerta de la Iglesia, que es símbolo de apertura para que
las almas entren, pero que también es símbolo de lo que se cierra para que no
entren los que no deben entrar:
- Exorcismo:
“Te exorcizamos, Serpiente Antigua, aléjate de la Santa Iglesia de Dios. Te lo
manda la majestad de Cristo, el Verbo eterno de Dios hecho hombre, quien para
salvar a la estirpe perdida por tu envidia, edificó su Iglesia sobre roca firme.
Amén”.
- Un
exorcismo más: “Te exorcizo, Serpiente Antigua, aléjate de este templo, aléjate
de esta ciudad, aléjate de esta diócesis, aléjate de la Santa Iglesia de Dios.
Te lo manda Dios Padre +, te lo manda Dios Hijo +, te lo manda Dios Espíritu
Santo +. Por Cristo Nuestro Señor. Amén”.
Unción de
las puertas, en silencio: El Padre Fortea trazó dos cruces con el Sagrado
Crisma, una en cada puerta, y otras dos cruces en el eje central del portón. La
puerta es símbolo de acogida, pero también es símbolo de que la Iglesia se debe
cerrar a todo aquello que no tiene cabida dentro de ella. Los demonios no
tienen cabida dentro de la Iglesia, son sus enemigos, y lo único que hace la
Iglesia respecto a ellos es expulsarlos.
10) Oración
final: “Señor, Dios nuestro, que libras de las ataduras del pecado a tus hijos
y los defiendes contra el Maligno y sus secuaces, haz que constantemente crezca
nuestra esperanza de conseguir el premio de tu gloria. Por Nuestro Señor
Jesucristo”. Luego vino la Bendición, y con un canto mariano terminó la
celebración.
Recordemos
que el 12 de diciembre de 2014, en la catedral primada metropolitana de la
arquidiócesis de México, en la Santa Misa presidida por el cardenal Juan
Sandoval Iñiguez, México fue consagrado al Sagrado Corazón de Jesús y al
Inmaculado Corazón de la Virgen María. Ahora, con el Magno Exorcismo celebrado
el 20 de mayo en la catedral de San Luis Potosí, lo que resta es modificar
nuestras actitudes para deponer toda acción de violencia y confiar, con la fe
en Cristo-Jesús, en que pronto terminará la violencia en México, se reducirán
sustancialmente los abortos y recuperaremos la paz. Oremos todos juntos para
que así sea, en el nombre de Jesucristo.